En el mes de mayo de 1922 nació José Ramírez Martínez. Empezó a trabajar en el taller de su padre a los 18 años; y aunque no gozó de ningún privilegio, muy pronto fue admitido como oficial de primera y no tardó en empezar a hacer experimentos para seguir desarrollando la guitarra como instrumento de concierto.

Debido a la falta de materiales, sus investigaciones resultaban poco rentables y fueron detonantes de varias discusiones con su padre, ya que José Ramírez II vendía sus experimentos sin que pudiera tener el seguimiento de su trabajo como le hubiera gustado.

En 1954 falleció su hermano Alfredo, que realizaba la labor administrativa y que era, además, su mejor aliado. Estaba convencido de que, con su labor de investigación, José lograría alcanzar su objetivo.

Sus muchas indagaciones dieron frutos interesantes; como lo fue el descubrimiento del cedro rojo para la tapa armónica en el año 65, que más tarde fue adoptado por prácticamente todos los constructores de guitarras del mundo (aunque al principio fue muy criticado por salirse de lo “tradicional”).

También probó con diferentes barnices; a falta de un barniz más consistente y rico, que no solo protegiera la madera, sino que también favoreciera el sonido del instrumento; ya que por aquella época las guitarras todavía se barnizaban con gomalaca. Finalmente, consiguió que el propietario de un laboratorio, que simpatizó con sus inquietudes, elaborara para él un barniz con base de urea- formol que dio un excelente resultado.

Hizo varias pruebas con la longitud de cuerda, llegando al tiro que le dio el mejor resultado en cuanto a la proyección del sonido, sin que por ello resultara demasiado incómodo: 664mm. No obstante, había también demanda de un tiro más corto, por lo que junto con su hijo José Ramírez IV diseñó una guitarra con tiro de 650 mm.

Aquel modelo se denominó C86, haciendo referencia a su año de creación, 1986. Posteriormente, su hijo José Enrique, modificó su diseño, manteniendo la longitud de cuerda de 650mm y cambiando el nombre del modelo: modelo Especial.

En el año 1983 diseñó la guitarra de cámara con la intención de eliminar las notas “lobo”. Dio unos resultados bastante positivos: mayor la limpieza y claridad en su sonido, haciendo de esta guitarra un buen instrumento para las grabaciones de estudio.

De entre sus experimentos y estudios, es referencia obligada dedicar un espacio a la guitarra de 10 cuerdas, diseñada por él a principios de los años 60. Primero hizo unas pruebas basadas en la “viola d’amore”, pero al no obtener resultados satisfactorios buscó la colaboración de Narciso Yepes.

También desarrolló la guitarra de 8 cuerdas junto al guitarrista José Tomás.

Jose Ramirez I
Jose Ramirez III
Jose Ramirez IV
Enrique, Amalia y Cristina Ramirez