Hola, soy Amalia Ramírez, y hoy quiero compartir con ustedes la fascinante historia del modelo Segovia, una de las joyas más preciadas de Guitarras Ramírez. Este modelo no solo es significativo por su calidad y sonido, sino también por su profunda conexión con el excelente guitarrista Andrés Segovia y mi padre, José Ramírez III.
El origen del modelo Segovia
La primera guitarra modelo Segovia fue creada en 1963. Mi padre, José Ramírez III, construyó esta guitarra con una tapa de cedro rojo, un material que no era común en la fabricación de guitarras en aquel entonces. Este innovador enfoque cambió la trayectoria de nuestra artesanía y dejó una marca indeleble en la historia de la guitarra clásica.
Encuentro con Andrés Segovia
Cuando mi padre terminó de construir esta guitarra, decidió mostrársela a Andrés Segovia, quien ya era una figura legendaria en el mundo de la guitarra clásica. Segovia quedó fascinado con la guitarra y la utilizó durante mucho tiempo. Su forma de tocar impregnó las maderas de la guitarra con un carácter único, lleno de colorido, calidez, y una complejidad de tonos que solo un maestro como él podía lograr. Finalmente, mi padre intercambió esta guitarra por otra y guardó la original en nuestra colección, donde aún reside como un tesoro invaluable.
La evolución del modelo de guitarra Segovia
El modelo de guitarra Segovia se convirtió en un símbolo de innovación y excelencia. La adopción del cedro rojo para la tapa supuso un importante avance en la fabricación de guitarras, ofreciendo una nueva voz y una paleta de colores sonoros que ampliaron las posibilidades expresivas de los guitarristas. Este material se impuso rápidamente en la construcción de guitarras tanto españolas como acústicas, y muchos fabricantes lo utilizan desde entonces.
Una serendipia afortunada
El descubrimiento del cedro rojo fue una serendipia. Mi padre envió a uno de sus aprendices a comprar cedro para mangos y, por error, este trajo madera para tapas. En lugar de enfadarse, mi padre vio potencial en las vetas de la madera, similares a las del abeto, y decidió hacer una prueba. Cortó la madera al grosor de una tapa de guitarra y la dejó reposar sobre una plancha de metal durante la noche. A la mañana siguiente, descubrió con asombro que la madera no se había combado ni retorcido. Así nació la primera guitarra con tapa de cedro, un instrumento que ahora cumple 60 años.
Preservando el legado
En homenaje a Andrés Segovia y José Ramírez III, hemos reproducido la guitarra Ramírez modelo Segovia con todas sus características originales, incluyendo el Palo Santo de Río que hemos guardado en nuestro almacén durante más de 60 años. Este modelo no solo es una celebración de nuestra historia, sino también un compromiso con el futuro de la música y la cultura española.
Apoyo a la Fundación Andrés Segovia
Para honrar el legado de estos dos genios de la guitarra, destinamos un porcentaje de la venta del modelo Segovia para apoyar la labor de la Fundación Andrés Segovia. Esta fundación se dedica a preservar y difundir la trascendencia del trabajo de Andrés Segovia y a apoyar a nuevos talentos de la guitarra, tanto guitarristas como compositores.
El modelo Segovia no es solo una guitarra, es una pieza de historia, un testimonio de la innovación y la excelencia artesanal que caracteriza a Guitarras Ramírez. Cada una de estas guitarras es un tributo a la genialidad de Andrés Segovia y a la visión de mi padre, José Ramírez III. Estamos orgullosos de continuar este legado y de compartirlo con el mundo, ofreciendo instrumentos que no solo suenan bien, sino que también cuentan una historia.
Gracias por acompañarnos en este viaje a través del tiempo y la música. Espero que esta historia les haya acercado un poco más al maravilloso mundo de Guitarras Ramírez y al legado del modelo Segovia.
Amalia Ramírez
